No hay excepción de épocas, porque todo es cíclico. Tampoco de problemas fundamentales y existenciales, porque se repiten generación tras generación. Cambian de formas y de orden de prioridades según el estado evolución del ser humano. Se pierden en el tiempo sus orígenes y permanecerán así en el futuro.
Quiero decir con esto que, como nuevo Gran Maestro de La Gran Logia General de España puedo, debo y quiero construir sobre las bases de mis antecesores: Seguir impulsando la ilusión por el conocimiento y el saber; Impulsar el desarrollo de los Hermanos Francmasones de acuerdo a sus cualidades innatas; y sembrar la duda para buscar y acertar el camino que cada uno haya iniciado.
Búsqueda y reflexión son palabras de sosiego para encontrar la paz interior y poderla transmitir a los demás; contagiar la alegría; la ilusión y saber gestionar la plenitud y la excelencia, dado que nuestros parámetros de exigencias se elevan sobre los del mundo profano.
Quiero concluir recordando las palabras: esfuerzo; humildad y esperanza. Pilares sobre los que cada uno debe seguir construyendo su templo interior y sepa que cada eslabón de la cadena de unión que formamos los Francmasones es más importante que los cargos o títulos que ostentemos. Todos somos Aprendices.
J.S.R. Gran Maestro de la Gran Logia General de España (Junio 2018)
Gran Logia General de España 